República se quedó con el clásico ante México, le quitó el invicto y también la punta del Apertura; ambos acarician la clasificación
Festejo, punta y media clasificación asegurada. República terminó con el invicto de México 86, se quedó con el clásico de la 8° fecha del torneo Apertura y quedó a sólo un empate de asegurarse uno de los seis lugares con vistas a la Fase Campeonato de la Súper Liga.
En un partido cambiante de principio a fin, no exento de goles, expulsados y polémicas, el equipo radiofónico se impuso por 3-2 y desplazó de la punta a su rival. Y de yapa acaricia la clasificación a la siguiente instancia del torneo.
Ambos equipos, con jugadores que ya se conocen con lujo de detalle tras varios años compitiendo en la Súper Liga, armaron un verdadero partidazo. Y como no podía ser de otra manera, una genialidad individual quebró la paridad. Renzo Silvero, con su característico sello distintivo en la pelota parada, le dio con sutileza a la redonda para hacer estéril el intento de Molina y marcar el 1-0 para los dirigidos por Santiago Tracy Gómez cuando el reloj apenas marcaba 12’ del primer capítulo.
La respuesta del Azteca, sin embargo, no tardó en llegar. Antes de los 20’, y tras una contra bien organizada, Luciano Lembo sacó rédito de su velocidad, encaró rumbo al arco de Matías Fernández y definió contra un palo para el 1-1 que dejó todo como al principio.
El partido mostró suma paridad. México apeló a la velocidad de sus atacantes y República gestionó su fútbol a partir de un más consolidado andamiaje colectivo.
En este contexto de ida y vuelta, el múltiple campeón de la Súper Liga aplicó un golpe certero a las ilusiones de su rival sobre el cierre de la primera mitad. Arturo Maczemchuk, que ya le había marcado a México en la Copa de Oro 2024, se impuso en terreno hostil, le ganó a la defensa azteca y entrando por el sector derecho sacó un potente remate para devolverle la ventaja a República y encarar con mayor expectativa lo que estaba por venir.
El encuentro ganó en emotividad en el comienzo del segundo tiempo, cuando una mano dentro del área republicana derivó en el penal para México y la posterior conversión del paraguayo Víctor Ortega Díaz.
La felicidad por el empate rápidamente se transformó en tristeza tras la expulsión de Manuel Verón por conducta violenta. República capitalizó el viento a favor y en cuestión de minutos encontró nuevamente la ventaja en la cabeza de Mauro Villalba tras un córner bien ejecutado por Mauricio Gómez.
El juego levantó temperatura segundos después, México perdió a su goleador Jorge Brítez por doble amarilla y la cosa se hizo muy cuesta arriba ante un adversario aplomado que tenía superioridad en el marcador y también en la cancha.
República le bajó las persianas al partido y sumó tres puntos de oro que lo dejaron no sólo en lo más alto de las posiciones, sino en las puertas de la clasificación a la Fase Campeonato. El Azteca, por su parte, sufrió su primera caída en el torneo y ahora es escolta a un punto, aunque también está muy cerca de la clasificación y sueña con tener revancha en el hexagonal final por el título.


















